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domingo, 29 de diciembre de 2013

¿Donde quieres pasar tu eternidad?













Antes de que respondas te diré.
La biblia me enseña que hay dos caminos que conducen a la eternidad; pero solo uno que...

martes, 24 de diciembre de 2013

Un amor tan grande.















Quizás te sientes solo, desanimado, sin fuerzas para continuar en la vida que llevas.
A lo mejor tu familia te ha hecho a un lado y sientes que se han olvidado de ti, o...

viernes, 20 de diciembre de 2013

Marcando la diferencia.


Características básicas que definieron a Noé como un hijo de Dios.












Cuando llegamos a los pies de Cristo,  nuestra pasada manera de vivir experimenta cambios positivos que no solo...
demuestran que Dios esta en nosotros, sino que verdaderamente le amamos, por lo que procuramos hacer todas las cosas de acuerdo a su voluntad y no la nuestra.
Estos cambios se convierten en características que nos definen entre el montón, glorificando así con nuestros hechos a Dios.
Sabemos que como seres humanos podemos en el transcurso de nuestro caminar, cometer errores y muchos hemos escuchado a otros decir que perfecto solo Dios; pero hay algo importante que no debemos olvidar y es lo siguiente.
 
San Mateo 5:48 dice:
Sed,  pues,  vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.

Dios quiere que nosotros también seamos perfectos en toda nuestra manera de vivir y aunque tenemos nuestras debilidades, y a veces nos pareciera imposible de lograr, no quiere decir que no podamos serlo.

En el libro del Génesis, capitulo seis en adelante hasta el capitulo nueve, encontramos la historia conocida de Noé,  un hombre igual que cualquiera de nosotros, con las mismas debilidades, pero que  tuvo algo con lo que marcó la diferencia.

Poseía las siguientes características que lo definieron como un hombre  recto y con las cuales fue hallado agradable ante los ojos de Dios, cualidades que solo se poseen teniendo un corazón y una mente dispuesta al servicio de Dios y por las cuales es que fue elegido de entre el montón para llegar a ser el principio de una nueva generación.

Primera característica.
1-Temeroso de Dios.
Génesis 6:9 dice:
 Noé, varón justo, era perfecto en sus generaciones; con Dios caminó Noé.

Cuando hablamos de temer a Dios, nos referimos a tenerle respeto y aborrecer todo aquello que para él es desagradable y abominable.

Proverbios 8:13 dice:
El temor a Jehová es aborrecer el mal.

Mientras vivimos una vida sin Dios, todo en ella es prácticamente desagradable y malo, aunque en nuestra propia opinión no lo sea, pero cuando damos lugar a Dios para que transforme nuestras vidas, nos damos cuenta de que no éramos tan buenos como creíamos y por ende las cosas que hacíamos no eran tan agradables como pensábamos.
Noé vivía en una generación perversa y corrompida que practicaba cosas desagradables a Dios, pero él tomo la decisión de no ser partícipe con ellos.

Otra forma de temer a Dios es ser obedientes en todo lo que él nos dice que hagamos, la obediencia es temer a Dios,  tenerlo siempre en primer lugar ante todo y seguir al pie de la letra su palabra, no importando lo que los demás nos digan o piensen, ya que muchas veces las cosas que Dios nos pedirá que hagamos, para los demás parecerá locura, como lo fue en el caso de Noé, (el diluvio y el arca)

Nótese que al final del versículo dice: Con Dios caminó Noé.
Dios es prefecto, y para poder seguir sus pasos debemos procurar perfección en todo lo que hacemos.
Solo de esta manera podemos ser vistos agradables ante Dios.
Noé tenía debilidades, pero procuraba siempre presentarse recto ante Dios en todas sus acciones y vigilaba que su familia también lo fuera, por eso cuando Dios nos pide que seamos perfectos, quiere decir que actuemos con rectitud ante él, haciendo lo correcto no solo en nuestras vidas, sino para con los demás.

Génesis 6:8 dice:
Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.

Cuando procuramos vivir una vida agradable de continuo ante Dios, el se agrada, le somos agradables y por esta gracia fue que Dios tomó en cuenta a Noé y le salvó del diluvio a  él y su familia.

Segunda característica.
2-Justo. (Definición: Perfecto, recto)
Génesis 7:1 dice:
Dijo luego Jehová a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca; porque a ti he visto justo delante de mí en esta generación.

Los ojos de Dios están siempre atentos a lo que hacemos y no hace acepción de persona cuando nos mira.

Proverbios 15:3 dice:
Los ojos de Jehová están en todo lugar, mirando a los malos y a los buenos.

Noé estaba en  medio de una generación perversa, que practicaba cosas desagradables y malignas ante Dios, pero él, aunque estaba en medio de ellos, no era como ellos.
El caminaba con Dios , seguía los pasos de Dios y no solo lo seguía, sino  que enseñaba a sus hijos el camino por el cual andar correctamente,  marcando así la diferencia no solo en su vida personal, sino familiar, por lo que Dios lo vio y  decidió  salvarlo a él y a su familia también.

Proverbios 9:10 dice.
El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia.

Noé no solo era un hombre Justo, sino que también era sabio e inteligente, ya que  a pesar de vivir en medio de un mundo lleno de pecado,  decidió seguir a Dios, aun así fuera, la burla de todos. Una decisión muy inteligente sin lugar a duda.

Tercera característica.
3- Obediente.

En Génesis 6:13, vemos como Dios le dijo a Noé lo que haría a las gentes por la maldad que hacían,  y más allá en la lectura, vemos que le ordenó  hacer el arca, le dio las medidas y también instrucciones de cómo construirla paso a paso.
Luego le dijo que tomara a los animales en un orden especial y que buscara provisiones para él, su familia y para los animales que estarían con él en el arca.
Noé no replico, sino que obedientemente hizo todo lo que Dios le dijo sin importar lo difícil y loco que pudiera parecer a los demás.
Dios se agrada en la obediencia, ya que en este relato se menciona en dos ocasiones la obediencia que mostró Noé con respecto a lo que Dios le dijo que hiciera.

Génesis 6:22 dice:
Y lo hizo así Noé; hizo conforme a todo lo que Dios le mandó.

Génesis 7:5 dice:
E hizo Noé conforme a todo lo que le mandó Jehová.

Muchas veces creemos que con ir a una iglesia y cantar alabanzas o repartir un tratado en la calle, ya hemos cumplido con la obediencia que le debemos a Dios, pero hay una cita bíblica que dice lo siguiente.

Santiago 4:17 dice:
Y al que sabe hacer lo bueno y no lo hace, le es pecado.

Obedecer a Dios es bueno y trae muchas buenas cosas consigo, en este caso a Noé le salvo la vida, por otra parte la desobediencia es mala, y lo malo es  pecado.

Romanos 6:23 dice:
Porque la paga del pecado es muerte.

Por esta razón es que Dios decidió exterminar a todo ser viviente de sobre la faz de la tierra ya que dice que eran perversos,  y con mucha violencia,  hacían  cosas malas que no agradan ni tienen comunión con Dios, porque Dios es bueno y perfecto.

Hay muchas cosas buenas que podemos hacer, ya sea en casa, en el barrio, en la iglesia o en cualquier parte que estemos, y a veces por el tiempo, o por vergüenza o peor aun, por pereza, no lo hacemos y no debemos olvidar que eso se nos contará como pecado.
Por tal razón procuremos hacer todo lo que podamos para ser siempre obedientes y rectos ante Dios y alcanzar lo bueno que él tiene para nosotros cada día.

Cuarta característica.
4- Agradecido.
Algunas cosas pequeñas que ocurren en nuestra vida se convierten en gigantescos diluvios que hacen que muchas personas no puedan  ver las maravillas que Dios les ha dado, o que tiene para darles.
Se ven nublados y llenos de tristeza, por lo que pasan la mayor parte del tiempo quejándose y en algunos casos hasta  blasfeman diciendo que es fácil agradecer a Dios cuando se tiene todo.

No creo que haya sido muy divertido para Noé pasar todo aquel diluvio, aunque sabia que contaba con el cuidado de Dios; pero sin duda estaba muy agradecido de estar vivo y aunque no podía en aquel momento ver hacia afuera del arca, sabía y confiaba en las palabras de Dios cuando le dijo que después de un cierto tiempo todo pasaría, así que esperó, confió en ello aunque afuera los vientos y las grandes olas que golpeaban el arca dijeran lo contrario, el no se sentó a escucharlos,  ni se cruzó de brazos, sino que trabajando en lo que Dios le había mandado hacer , alimentando a los animales y cuidando de su familia cada día,  esperó lo prometido por Dios.

El verdadero hijo de Dios, el que camina con Dios y cree en él, en su poder así como su amor y misericordia, agradece  a Dios por solo el hecho de haberle dado un día mas de vida, una oportunidad para obedecerle  y  agradarle,  haciendo aquello que Dios le ha encomendado mientras  espera el tiempo de su venida que esta próxima, y ganar así el favor de Jehová, la vida eterna.

Génesis 8:20, 21 dice:
Y edificó Noé un altar a Jehová, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocausto en el altar.
Y percibió Jehová  olor grato.

Noé estaba agradecido por estar con vida, por la oportunidad que Dios le daba de seguir viviendo no solo a él sino a toda su familia.
Ofreció de lo mejor del arca y fue recibido por Jehová en olor  grato.

Hoy en día Dios no quiere sacrificios de holocaustos, ni de animales, solo hay algo tan valioso como ello que podemos ofrecerle y que le agradará si se da con sinceridad.

Proverbios 23:26 dice:
Dame, hijo mío, tu corazón, y miren tus ojos  por mis caminos.

Que más valioso que un corazón Obediente y Humillado ante su presencia, dispuesto a servirle con sinceridad y santidad.
El acto de agradecimiento mas sublime que podemos hacer es entregarle a Dios nuestro corazón, nuestra vida completa y disponerla a su servicio.

Salmos 51:17 dice:
Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciaras tú, oh Dios.

El en su infinito amor nos entregó a su hijo en la cruz del calvario para salvación de nuestras almas, lo menos que podemos hacer ante tal acto de amor, es amarlo y entregarnos por completo a él sabiendo que de él recibiremos  la vida eterna si vivimos una vida justa, recta y agradable ante él, marcando la diferencia y dándole siempre la honra y  gloria.

Una vez pasado el diluvio, Dios le mostró  a Noé un bello arcoíris en representación del pacto que estableció con él de no destruir más a la tierra con otro diluvio.

Génesis 9:13 dice:
Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por  señal del pacto entre mí  y la tierra.
                                                             
Génesis 9:16 dice:
Estará el arco en las nubes, y lo veré, y me acordaré del pacto perpetuo entre Dios y todo ser viviente, con toda carne que hay sobre la tierra.



Dios es prefecto y la única forma en que podemos tener un pacto con él es siendo nosotros perfectos ante él para  serles agradable ante su presencia, de otro modo nuestro fin será peor que el de aquella generación perversa que murió en el diluvio.

Como podemos ver Noé tenia en si cuatro características importantes con las que marcó la diferencia.



  1. Temeroso de Dios.
  2. Justo.
  3. Obediente.
  4. Agradecido.

Existen otras características que de igual manera nos ayudan a ser diferentes , pero en ocasiones no todas ellas están en una sola persona.
Es cuestión de estudiarse  y mirar con cuidado cuales características poseemos  que puedan marcar esa diferencia y poder así alcanzar la gracia de Dios.

Animémonos a ser diferentes y marcar la diferencia.



¡Dios te bendiga!

Jesús el buen pastor










San Juan 10:11 dice:
Yo soy el buen pastor,el buen pastor su vida da por las ovejas.